En Tranvía Mortal, un jugador actúa como el operador del tranvía y debe elegir dónde enviar un carro asesino y fuera de control. Todos los demás jugadores en la mesa juegan a las cartas y discuten para convencer al operador de que les perdone la vida y condene a todos en la otra vía a una espantosa muerte en tranvía.
En cada ronda, un jugador actuará como conductor del tranvía. Esta persona será el juez y elegirá qué vía asesinará el tranvía.
Cada uno de los demás jugadores se divide en partes iguales entre los equipos, y cada jugador tendrá un papel en la ronda.
Para comenzar, un jugador dibujará 3 pistas angelicales, elegirá una para jugar en la mesa y luego revelará aleatoriamente una segunda pista angelical del mazo para agregar a la pista. Otro jugador dibujará 3 pistas demoníacas y elegirá agregar una a la pista de los equipos contrarios, intentando sabotearlos y salvar sus propias pistas. Finalmente, los jugadores sacarán modificadores de pista para colocarlos en cualquier carta de pista de la mesa. Pueden jugar en sus propias pistas, para influir en el juez, o pueden jugar en sus oponentes, para influir aún más en el juez para que asesine la pista de su oponente.
El juez reflexionará sobre este enigma y finalmente decidirá asesinar una pista. ¡La pista que se salvó es la ganadora de la ronda!
El juego continúa durante un número de rondas predeterminado por el número de jugadores en la mesa.
Tranvía Mortal es un juego para 3-13 jugadores, y se juega en unos 30-90 minutos.