Aprender a jugar y preparar la partida os llevará muy poco tiempo. ¡Enseguida estaréis creando vuestro ecosistema tropical particular! Para empezar, dejad a un lado las fichas de puntos y barajad por separado los mazos de semilla y selva. Este último mazo lo dividiréis en 3 pilas parecidas, que corresponderán a cada una de las 3 estaciones o rondas en las que se dividirá la partida. Del mazo correspondiente a la primera estación, tomad seis cartas y distribuidlas boca abajo en los espacios de nuevo crecimiento formando tres columnas (la primera con una carta, la segunda con dos y la tercera con tres). El último jugador que haya regado una planta empieza la partida.
Para expandir el bosque, por turnos los jugadores irán tomando cartas de crecimiento del mercado central. Durante su turno, un jugador puede mirar las pilas en orden y decidir si se la queda o no. En caso de no quedársela, añade una carta del mazo boca abajo a esa pila y mira la siguiente. Si por el contrario quiere conservarla, toma todas las cartas y las coloca en su zona de juego. Así los jugadores van dando forma a su selva tropical. Las cartas de árbol, vegetación o vida salvaje otorgan puntos al final de cada estación y en algunos casos también tienen efectos inmediatos. Los turnos se van sucediendo hasta que se agotan las cartas del mazo, momento en el que se lleva a cabo una fase de puntuación.
Pasadas las tres estaciones, el jugador con el bosque más exuberante, es decir, que haya acumulado más puntos a lo largo de las rondas, gana la partida. Hay bonificadores de puntos para quien tenga más árboles o el tronco más alto, para las combinaciones de cartas de tiempo soleado y lluvioso y ciertas parejas de plantas y animales. Las cartas de fuego, sequía y enfermedad os restarán puntos… Pero también puede que afecten a vuestro rival. En Amazonia, ¡Hay varias estrategias posibles y más de un camino hacia la victoria!
Explorar el mazo y encontrar las mejores combinaciones posibles se convertirá en todo un reto, también en solitario. Y todo ello en un formato portátil y con un arte muy cuidado y realista. Amazonia es un juego que encantará tanto a los más esporádicos como a los más experimentados en el mundo de los juegos de mesa, con una temática muy particular: ¡Sentirás que estás construyendo tu propia selva!